Todos, en algún momento de nuestra vida, solemos pasar por dificultades. Algunas más serias que otras.

Las más simples suelen resolverse con sentido común, criterio y flexibilidad, pero hay otros casos que requieren ayuda y asistencia. Para eso existen las terapias y los terapeutas.

Más de treinta años de experiencia en terapias sexuales y de pareja, me permiten afirmar que la mayor parte de las situaciones críticas tienen solución si la consulta es oportuna.

Las personas y las parejas tienen que comprender que una terapia es una inversión en su futuro, especialmente si ella ofrece herramientas concretas para superar las crisis.

Los problemas del deseo, del desencuentro, del aburrimiento, del estrés que afecta la calidad de vida no deben ser aceptados con resignación, porque son como la gota que finalmente horada la piedra sobre la que cae y culmina en la ruptura.

Los temas sobre los que más me consultan son:

• Bajo deseo sexual.
• Adicciones sexuales.
• Frecuencia sexual.
• Conflictos de pareja homosexuales.
• Conflictos de pareja.